miércoles, diciembre 02, 2009

Universidad Nacional de Tucuman, testimonios de afectados por la minería.

Organizaciones sociales de toda la región fundamentaron ante los consejeros superiores por qué la UNT es socia de una empresa cuya explotación minera afecta la supervivencia de las comunidades ligadas a su proceso productivo. Desde la proliferación de enfermedades hasta las denuncias por contrabando. Frente a las graves acusaciones vertidas en los testimonios, el Consejo Superior evidenció la ignorancia de sus propias potestades para intervenir en la problemática. Una comisión interdisciplinaria analizará las denuncias efectuadas contra la minera.

Algunos no salían de su asombro. Otros, incómodos, intentaban aparentar sorpresa. Algunos, desde su cómplice ignorancia, evidenciaron gestos de emoción por la sucesión de testimonios vomitados en esa sala. Otros, más adentrados en la realidad, reinventaban para sí pretextos con los cuales poder evadir alguna sensación de responsabilidad. En una sesión considerada por ambas partes como histórica, los consejeros superiores universitarios se dieron ayer de bruces con una problemática que, hasta ahora, muchos de ellos la percibían más ligada al reclamo paranoico y politizado de un grupo de fundamentalistas verdes que a la supervivencia de comunidades enteras. Tras finalizar la extensa sesión extraordinaria –se acercó a las cinco horas de duración- la primera sensación esbozada por las organizaciones sociales tuvo sabor a desahogo y expectativa. Desahogo, porque se trató de una oportunidad que se les negó por años hasta que pudieron fundamentar su rechazo a la socia minera de la UNT. Expectativa, porque, como uno de los referentes sostuvo al finalizar el encuentro, “ahora ya están enterados de lo que realmente pasa y no tienen excusas para no hacer nada”. Desde Concepción, Belén, San María, Termas de Río Hondo, Tafí del Valle, Andalgalá, Cafayate, San Fernando del Valle de Catamarca, referentes regionales narraron ante el órgano deliberativo universitario las causas por las que la actividad agrícola y ganadera en los Valles Calchaquíes –y zonas de influencia de la minera- obliga a replantear las actividades económicas desarrolladas históricamente para poder subsistir. Se les explicó a los consejeros la obvia vinculación entre el saqueo destructivo minero y la lógica del sistema capitalista imperante. También se les contó cómo las instituciones públicas de ciudades bajo la influencia de Minera Alumbrera (escuelas, municipios, hospitales, etc.) pasaron a ser centros propagandísticos de esta empresa gracias al aporte de fondos para obras públicas con las que se intenta disfrazar la responsabilidad de los gobiernos encubridores. En la sesión de ayer, desde los testimonios de los oradores elegidos por la Asamblea Socioambiental se dejó en claro por qué una serie de análisis efectuados al concentrado derramado en sucesivas roturas del mineraloducto, fundamenta las denuncias de cuencas hídricas contaminadas, proliferación de enfermedades de todo tipo y hasta acusaciones de contrabando. Sin embargo, la atmósfera de conmoción que se adueñó por momentos de la sala de sesiones, pareció disiparse en forma precipitada cuando, tras los relatos, todo quedó en manos de los consejeros. Ya enterados de una problemática que no supieron ver –o no quisieron-, decidieron justificar la ignorancia de sus competencias. Con un show de penas de ocasión oportunamente disipado, optaron por esperar a enterarse, tras más de un año y medio en el cargo, cuáles son las potestades que, como cuerpo, ostentan para poder intervenir en la relación societaria entre la minera y la institución educativa que representan. En rigor, se aprobó acudir a la Dirección de Asuntos Jurídicos para que se los ponga al tanto sobre las atribuciones que ellos –los consejeros- tienen a la hora de intervenir sobre YMAD. También, por moción del consejero Raúl Torres Zuccardi, se acordó que, una vez definidas las potestades del cuerpo, se conformará una comisión entre representantes de diversas facultades que estudiarán el impacto ambiental de Minera Alumbrera con el aporte de documentación de las organizaciones sociales. Por Esteban Stanich


Tomado de www.primerafuente.com.ar

No hay comentarios.: